En estos esquemas se muestran los dos tipos de movimiento y su combinación, que ocurren como consecuencia del movimiento del público en estadios no preparados para espectáculos musicales masivos. Para evitar estos movimientos específicos se deben realizar costosas construcciones y modificaciones estructurales del estadio. Los estadios deportivos no fueron proyectados para los movimientos del público, fueron proyectados para lo que se llaman cargas estáticas; personas sentadas o en pie -gritando un gol- y en el campo de juego jugadores, jueces y algunos técnicos. Varios estadios de USA fueron demolidos totalmente para dar lugar a nuevas y costosas construcciones sismorresistentes que permitiesen su uso para festivales de música joven.
Las vibraciones generadas por el pogo se propagan como ondas sísmicas en todas direcciones, provocando el movimiento del suelo tanto en forma horizontal como vertical.
Las ondas P, consisten en la transmisión de las compresiones de forma similar a la propagación del sonido (movimiento oscilatorio).
El segundo tipo, ondas S, consiste en la propagación de las compresiones en ondas en las que las partículas se mueven en dirección perpendicular a la dirección de propagación (movimiento trepidatorio)
La frecuencia de estas ondas (que es totalmente variable de acuerdo a la música y al entusiasmo del "pogo") afecta a las estructuras de forma diferente. Un edificio que es afectado en una oportunidad puede no serlo en otra. Esto se observa muy bien en el siguiente experimento:
Obsérvese que cuando el operador cambia la frecuencia que aplica en la base, afecta a un "edificio" o a otro "edificio". De acuerdo a la frecuencia varía el "edificio" que se mueve. Obsérvese también que en todos los casos los movimientos son muy bruscos y desproporcionados a la fuerza que se aplica en la base.
Además la combinación de ambas ondas (de oscilación y de trepidación) provoca movimientos en los tres ejes, de efectos también impredecibles, ya que varían de acuerdo a la frecuencia de las ondas, a la altura y tipo de las construcciones y a las combinaciones variables de estos elementos. También es fundamental la capacidad de transmisión del suelo de acuerdo al tipo de terreno. En terrenos como el nuestro, siempre encharcado por ser terrenos ganados al río, el suelo transmite las ondas a través del agua.
Las ondas P, consisten en la transmisión de las compresiones de forma similar a la propagación del sonido (movimiento oscilatorio).
El segundo tipo, ondas S, consiste en la propagación de las compresiones en ondas en las que las partículas se mueven en dirección perpendicular a la dirección de propagación (movimiento trepidatorio)
La frecuencia de estas ondas (que es totalmente variable de acuerdo a la música y al entusiasmo del "pogo") afecta a las estructuras de forma diferente. Un edificio que es afectado en una oportunidad puede no serlo en otra. Esto se observa muy bien en el siguiente experimento:
Obsérvese que cuando el operador cambia la frecuencia que aplica en la base, afecta a un "edificio" o a otro "edificio". De acuerdo a la frecuencia varía el "edificio" que se mueve. Obsérvese también que en todos los casos los movimientos son muy bruscos y desproporcionados a la fuerza que se aplica en la base.
Además la combinación de ambas ondas (de oscilación y de trepidación) provoca movimientos en los tres ejes, de efectos también impredecibles, ya que varían de acuerdo a la frecuencia de las ondas, a la altura y tipo de las construcciones y a las combinaciones variables de estos elementos. También es fundamental la capacidad de transmisión del suelo de acuerdo al tipo de terreno. En terrenos como el nuestro, siempre encharcado por ser terrenos ganados al río, el suelo transmite las ondas a través del agua.
